La educación, al igual que muchas de las actividades de carácter social, por el tiempo de pandemia se debió reinventar; es decir, transformarse. Pero, es muy prematuro creer que se ha logrado pasar a lo digital, sin que este no genere inconvenientes de carácter social y académico, ya que muchas personas de bajos recursos se sienten excluidas, por el hecho de no contar con la conectividad y, menos, con los instrumentos informáticos; a todas estas, se le suma lo académico, donde la pedagogía cambia de estrategia. Algo brusco para muchos que no habían experimentado la virtualidad, donde las universidades que tenían esa modalidad se potencializan y las demás, apenas se adaptan.
Ventajas y desventajas de la era virtual
La era virtual llega de repente. Quizás muchas universidades, institutos, colegios, escuelas e incluso jardines educativos, tendrán la posibilidad de operar sin mayor inconveniente; pero éstas, son estratificadas, lo cual se convierte, severamente, en desigualdad social. Las poblaciones menos favorecidas son las que padecen los cambios actuales, las cuales experimentan discriminación, incluso, alta deserción, sin decir, de la calidad educativa. Por otra parte, la virtualidad da algunas ventajas, ya que se adquiere métodos de avanzada tecnología, en donde se puede ser muy competitivo y estar a la vanguardia del siglo 21.
Estudiantes universitarios opinan
Ederson Vargas, estudiante de tercer semestre de Negocios Internacionales de la Universidad EAFIT, habitante del barrio Granizal, expresa que “ya era hora de estar en la práctica de la tecnología; no se podía esperar una pandemia, como excusa. Lo lamentable es que no se cuenta con la infraestructura en muchas universidades; se nota la falta de inversión de los gobiernos en las escuelas y colegios de carácter público; no se tienen condiciones dignas y, por ende, bajo rendimiento académico.”
Jonathan Gómez, estudiante de Ingeniería de Sistemas, de la Universidad Cooperativa de Colombia, indica que “estar sin tecnología es tener atraso en el desarrollo, porque no es posible que un profesional no esté preparado para afrontar los nuevos retos que ofrece el mundo de hoy.”
Es controversial tener la tecnología como un privilegio de pocos; riñe con la pobreza, que es una verdadera tristeza, por el hecho de ser, con muchos sectores de la ciudad de Medellín, algo excluyente; es inverosímil tener la ciudad que se jacta en ser la más innovadora y se tengan altos índices, en familias, sin conectividad y sin equipos; así llegar a la transformación de la educación es una verdadera utopía.
Willy Alcaraz García: willyalcaraz1080@hotmail.com
Alonso Rodríguez: noticiasinfo1@gmail.com