Tenemos una responsabilidad: Cuidar a los y las niñas

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Tatiana García Bustamante y Marisol Guachetá, ambas de la Unidad de Infancia de la Secretaría de Inclusión Social, Familia y Derechos Humanos, comentan sobre esta problemática que se viene presentando desde hace un tiempo y muchas personas de la comunidad hacen caso omiso por este tema. Consiste en la utilización sexual de niñas, niños y adolescentes para obtener ganancias sexuales, económicas, sociales o políticas, fruto del aprovechamiento de una posición de vulnerabilidad, desequilibrio de poder o confianza respecto del adulto, abusador o explotador.
Plantea Marisol Guachetá que “estos fenómenos son de índole multicausales, ya que no es solo la parte económica de la explotación para niñas, niños y adolescentes, lo cual es preocupante para cada uno de nuestra comunidad en general, pues, también, todas las familias se ven propensas a pasar por alguna de estas causas de abuso”.
Adicionalmente Tatiana García agrega que “debemos visibilizar un enorme proceso de acompañamiento para cada persona, niña, niño y adolescente; buscar que se logre entender esta problemática y dar opiniones sobre todo el tema, apoyar más a nuestros niños y niñas desde lo simple hasta lo más profundo de sus condiciones, y prestarles atención cuando nos hablan, brindarles confianza para que seamos garantes de que nos puedan contar todos sus problemas y no se vayan a la calle a comentar con otras personas ajenas sus cosas”.
Cada acompañamiento con nuestros niños, niñas y adolescentes debe ser la base principal, bien sea en lo psicológico o personal. Llevar un mensaje de amor y conciencia que nos permita fortalecer nuestros roles de padres o cuidadores, pasar de llenar vacíos con lo material, para llenarlos más con escucha, abrazos, comprensión, cuidado y amor.
Según las expertas, es importante la articulación de las mesas comunales en niñez, el trabajo con la policía, el diálogo educativo con los niños y las niñas y la vinculación pedagógica y preventiva de las familias y los organizaciones sociales y comunitarias para la prevención de estos abusos.