Una Comuna con mucha historia

Se inicia la conformación de la Comuna.
A finales del siglo XIX, alrededor del manicomio del Paraje Bermejal, empieza la historia urbanística de lo que hoy es la Zona Nororiental de Medellín. Francisco Jaramillo Ochoa y su esposa Juana Francisca Ruiz, propietarios de esas tierras, entregaron al Obispo de Santa Rosa de Osos, Monseñor Miguel Ángel Builes, un documento según el cual: «si pasados cien años los herederos no habían levantado mortuoria, estas tierras quedarían a bien de una entidad beneficiaria para los pobres».
Desde sus inicios la Comuna no tuvo planeación de la estructura urbana y el asentamiento se realiza a través de la posesión informal, cuyo trazado es realizado por los dueños de terrenos en venta. Aparecen, entonces, los primeros asentamientos en los barrios Moscú 1, Granizal, Villa Guadalupe y San Pablo; en estos dos últimos, la trama urbana obedece a cierto orden, debido a que su proceso de ubicación fue promovido por los denominados «Urbanizadores Piratas», quienes, de alguna u otra forma, incorporaron el trazado original heredado de los españoles, respetando la retícula entre calles y carreras, manteniendo secciones viales aceptables y, además, reservando espacio para la plaza central.
En la carta geográfica de 1970, se puede apreciar una anarquía ocupacional del área restante de esta Comuna, surgen los barrios Santo Domingo 1 y Popular; se acaba de construir el barrio Granizal y empieza el proceso de ocupación de las áreas periurbanas con los mal llamados asentamientos subnormales tales como: El Compromiso, Aldea Pablo VI, La Esperanza 2 y Carpinelo.